BMW de segunda mano, una gran opción
Si estamos pensando en un vehículo con líneas deportivas en el interior y el exterior, un motor potente y fiable, con sistemas de seguridad sobresalientes y que además atraiga las miradas, es decir, un auténtico coche de lujo y además con un precio atractivo, estamos hablando de un BMW de segunda mano.
La historia de BMW
Los comienzos de esta marca se remontan a principios del siglo XX, cuando Karl Rapp funda la empresa ``Rapp Motorenwerke´´ en 1913. Unos pocos años después, en 1917, su nombre cambia a BMW (Bayerische Motoren Werke).
Dedicada en sus inicios a la fabricación de motores de avión, comienza, en 1917, a utilizar el tan característico logotipo que aún hoy en día identifica a la marca. La forma circular divida en cuatro secciones, representa a una hélice de avión en movimiento. Los colores el movimiento de estas sobre un cielo azul. Estos tintes, blanco y azul, no fueron escogidos al azar. Por ejemplo, en un día nublado el efecto podría ser blanco y gris, lo cual encajaría más con la imagen romántica que nos evoca el vuelo de un avión, es decir, un aparato sobre las nubes y no en un cielo despejado. La razón fue para hacerlos coincidir con los colores de la bandera del estado federado de la República Federal de Alemania ya que la fábrica fue fundada en su capital, Múnich.
¿Por qué comprar un BMW de segunda mano y no otra marca?
Superioridad sobre otras marcas. La marca BMW es la más vendida a nivel mundial, compitiendo con otras marcas como Audi o Mercedes. Algo querrá decir esto. Y es que cuando nos referimos a un BMW estamos hablando de vehículos de calidad superior. Es conocida la costumbre de los alemanes de crear productos que aúnen calidad y durabilidad. Estos vehículos combinan perfectamente componentes resistentes que aseguran un largo tiempo de vida a todo el conjunto porque no solo tienen motores robustos, sino que también disponen de excelente calidad en el resto de los componentes.
Deportividad. Es uno de los vehículos con mayúsculas en estética y comportamiento deportivo. La potencia de sus motores, la adherencia al firme, las líneas exteriores y también las interiores, diferencian a este vehículo sobre el resto. Es difícil que a uno no se le vaya la vista cuando lo tenemos cerca, incluso cuando hablamos de modelos menos actuales, especialmente si nos gusta la deportividad. Cualquiera de resulta divertido de conducir.
Seguridad. Estos coches están siempre equipados con los últimos sistemas de seguridad. Disponen de aquellos que poseen las otras grandes marcas e incluso algunos propios. Aún los BMW de ocasión, algo menos actuales, resultan vehículos sumamente seguros.
Estética. Jamás se ven desfasados o pasados de moda, pasan de ser últimos modelos a clásicos gracias a la línea que acertadamente han mantenido sus fabricantes desde los inicios. Poseedores de una firma de identidad, no es necesario fijarse en el logo para saber que se trata de un BMW. Resultan inconfundibles gracias a sus faros redondos, estén al aire, como en los modelos más antiguos, o dentro de un cristal como en los casos más modernos, y a las dos rejillas delanteras que cubren el radiador. Es decir, son coches atemporales de los que podremos presumir tanto si son nuevos como si han pasado los años.
Fiabilidad. Como indicábamos antes, los motores BMW son sinónimo de dureza y resistencia. No sólo es uno de los vehículos más demandados en estado nuevo, también como vehículo de segunda mano. El resto de los componentes y la chapa son igualmente de excelente calidad por lo que podemos estar seguros de que, aún en caso de der un BMW de segunda mano, no tendremos problemas de fiabilidad.
Precio. Hemos de tener claro que si queremos un vehículo de calidad superior y con una estética bonita tendremos que gastarnos un poco más que si simplemente queremos un coche que nos dure un tiempo determinado y al que le hagamos pocos km. Si adquirimos un BMW de ocasión en lugar de uno nuevo de otra marca y calidad inferior haremos una buena inversión ya que, a pesar de que tenga unos cuantos km o algún que otro año, la calidad de los componentes, la seguridad y la estética, serán seguramente superiores y además durará el mismo tiempo o más que otra marca inferior a pesar de que haya tenido otro conductor. Siempre que el vehículo haya sido adecuadamente mantenido y dada la fiabilidad de sus motores podemos estar seguros de que les haremos una gran cantidad de km más.
Combustible. Lejos queda ya eso de que a mayor potencia mayor consumo. Los motores BMW son altamente eficientes. Por esta razón podremos hacer muchos km, sin privarnos de mantener la velocidad deseada y de poder adelantar cómodamente a otros conductores sin que eso suponga ir de gasolinera en gasolinera. Con otro vehículo de marca menos puntera tal vez tengamos consumos superiores para alcanzar rendimientos similares.
¿Cómo comprar un BMW de segunda mano?
Particulares. Esta es una de las opciones que tenemos. Una de las ventajas de este método es que podemos adquirir el precio más económico ya que es él que decide el importe y además existe la posibilidad de negociar, bien en el precio del vehículo, bien en el pago de los trámites, o en ambos. Otra es que podemos ver el vehículo tal cual está antes de la venta. De otro modo podría estar retocado para que parezca que se encuentra en un estado mejor que el real. El poder tener contacto directo con el vendedor y conversar con él también nos ayudará a forjarnos una idea del trato que ha recibido el coche.
En un centro especializado. Esta opción tiene la ventaja de que, si son profesionales, el vehículo estará revisado en profundidad y en caso de que necesitara alguna reparación se le habrá realizado previamente. Hay que pensar que vender un coche y después tener al comprador reclamando no es ni mucho menos la mejor propaganda para una casa de compraventa. Además, en los centros especializados se da un periodo de garantía, con lo cual, si se les ha escapado algún detalle o existe algún defecto oculto, saldrá a la luz y se reparará dentro de dicho periodo.
Dicho lo cual, si queremos adquirir un vehículo deportivo y de líneas atractivas, con el que hacer muchos km, en el que nos sintamos seguros, olvidarnos de los problemas que pueden presentarse a la hora de realizar un adelantamiento y mantener una velocidad constante, sea cual sea la pendiente por la que circulemos, sin que eso suponga un despilfarro, un BMW de ocasión es una de las mejores opciones.
Considerado uno de los coches más elegantes del mundo, esta marca alemana está caracterizada por fabricar algunos de los coches de alta gama más vendidos de la historia del automóvil. Comprar un BMW de segunda mano es optar por uno de los vehículos más demandados entre los conductores y como toda marca, también BMW tiene sus ventajas y desventajas.
Ventajas de un BMW de segunda mano
Elegancia. Qué duda cabe que un BMW de segunda mano es sinónimo de elegancia y distinción. Para muchas personas, tener un BMW siempre ha sido un sueño y qué mejor que llevarlo a cabo aprovechando las ventajas económicas que tiene el comprarlo de segunda mano. Pese a los años, el porte y la solera de este coche no se pierden.
Más económico. Comprar un BMW de segunda mano es caro, es una de las marcas más costosas en vehículo nuevo. Sin embargo, podemos encontrar BMW de segunda muy bien conservados, de diferente antigüedad y a precios realmente asequibles. Ahora sí, podemos lucir por la carretera nuestro BMW.
Diversidad de modelos. En sus más de cien años de vida, la marca ha lanzado una enorme cantidad de modelos donde elegir. Coches que han ido mejorando con el paso de los años y el lanzamiento de nuevos modelos, o una ocasión única para comprar BMW de segunda mano a modo de inversión.
Desventajas de un BMW de segunda mano
El precio. Aunque comprar un BMW de segunda mano es infinitamente más barato que comprarlo nuevo, también sigue siendo uno de los coches de segunda mano más caros del mercado.
Mantenimiento. Lo mismo ocurre con su mantenimiento. También en BMW de segunda mano, el mantenimiento de los mismos es más costoso que el de otras marcas, y esto hay que tenerlo en cuenta.
Tamaño. Refinados y atractivos, estos coches también son de los más grandes del mercado. Lo cual puede implicar problemas para aparcar o para ajustarlo a la plaza del garaje. El tamaño de los BMWs de segunda mano también son algo más grandes que los modelos actuales con los inconvenientes que esto supone.